Aunque lo ideal es contar con un especialista que se encargue del mantenimiento de la piscina, muchos propietarios optan por ocuparse ellos mismos. Sin embargo mantener una piscina no es sólo echar una pastilla de cloro cuando el agua empieza a estar turbia.
Te damos tres consejos para realizar un mantenimiento casi profesional. Aunque recuerda que el mantenimiento entraña ciertos riesgos y es importante estar asesorado por un especialista.
1.- El pH: el gran desconocido.
La mayoría de los usuarios desconoce la importancia que el pH tiene para el equilibrio y la calidad del agua. Todo producto químico tiene un rango de efectividad según el valor del pH del agua en ese momento. Es imprescindible seguir las indicaciones del fabricante a la hora de mantener el pH del rango establecido.
Un pH alto o bajo puede provocar desde corrosión de las partes metálicas hasta irritaciones de la piel de los usuarios u otras afecciones más graves.
El pH ideal en una piscina debe situarse en un rango de 7,2 a 7,6. Para conocer los valores es necesario realizar una medición con RED PHENOL (producto disponible en nuestra tienda online). Si fuera necesario ajustar el pH deberás usar reductor o elevador de pH en polvo o en líquido (productos disponibles en nuestra tienda online).
2.- La importancia del mantenimiento de los filtros.
Una piscina no deja de ser un recipiente de agua estancada. Y para garantizar su salubridad debemos provocar de manera artificial una corriente de agua por medio de las bombas. Ésta genera movimiento en el agua que circulará por dentro de un filtro que se encargará de retener las impurezas del agua.
Pero ese filtro hay que limpiarlo periódicamente para que pueda seguir funcionando con normalidad. Sin embargo no es bueno hacer lavados del filtro con demasiada frecuencia ya que necesita un tiempo de maduración. El manómetro te indicará el nivel de suciedad que tiene tu filtro. En el código de colores del manómetro el rojo indica el tope. Te recomendamos que realices los lavados cuando el indicador del manómetro esté a punto de alcanzar este color. No mucho después pero tampoco antes.
3.- El limpiafondos
El limpiafondos es un elemento de vital importancia para el mantenimiento de una piscina. No sólo retira hojas y arena de tu piscina sino también restos orgánicos inapreciables a simple vista, lo que le convierte en un refuerzo fundamental para el filtro en su función de limpieza y mantenimiento del agua.
Es imprescindible pasar el limpiafondos todos los días para un mantenimiento eficaz y óptimo de tu piscina. Todos sabemos lo pesada que puede llegar a ser esta tarea, sobre todo en días de mucho calor y cuando no se tiene mucho tiempo libre. Para evitar este problema os recomendamos adquirir un limpiafondos automático. Puedes encontrarlos desde unos 60-70 euros y te facilitará mucho la vida. Tienes varios modelos en nuestra tienda online.
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